El Espacio Como Tercer Maestro. Creatividad, Arte y Emociones

El Colegio Zola Villafranca desarrolla un proyecto global de “Creatividad, Arte y Emociones”, este proyecto tiene por objetivo favorecer el desarrollo del pensamiento, en concreto de favorecer el pensamiento divergente. A través del fomento de la creatividad perseguimos sembrar en nuestros alumnos la capacidad de enfrentarse a situaciones diversas y saber resolverlas de la forma más positiva.

Dentro de este programa se enmarca el Atelier en Infantil, porque se ha demostrado que la creatividad tiene su punto álgido en la infancia. Apostamos también por la creación de un espacio Maker en la etapa de Primaria o el desarrollo de nuestro Bachillerato de Artes. Además, el colegio cuenta con una Escuela de Música y Escuela de Danza que fomenta la formación artística de nuestros alumnos desde la etapa Infantil hasta bachillerato.

Con todo ello se pretende que la creatividad sea algo trasversal en todo el camino formativo de nuestros alumnos y favorecer con ello el pensamiento divergente.  Además, como explica Noelia Fernández, responsable del programa de Atelier en Infantil, “el pensamiento divergente va de la mano de la alegría, el optimismo y el bienestar interior, cosas que son fundamentales para nuestro desarrollo emocional”.

Dentro del programa Creatividad Arte y Emociones, el cuidado de los espacios, los materiales… tiene un papel fundamental.Para nosotros el espacio es un tercer maestro.

Así, por ejemplo, en el Atelier que desarrollamos en la etapa de Infantil, creamos un ambiente especial contando con un material cuidadosamente elegido, intentamos que este material sea poco estructurado o no estructurado, favorecedor de experiencias y sobre todo favorecedor del aprendizaje cooperativo.

Los alumnos de Bachillerato de Artes (especialidad de Artes Plásticas y Audiovisuales) cuentan con aulas equipadas, en el Edificio de Artes, donde poder expresarse e incluso grabar su propio programa de televisión o radio…

El espacio es fundamental para que el niño pueda dar voz a sus ideas, inquietudes y su creatividad, respetando además el tiempo en el que cada uno de ellos descubre el mundo. El conocimiento se adquiere con la experimentación, y para que puedan tocar, investigar…tienen que disponer de un espacio adecuado.

El espacio actúa como tercer maestro, cuando se convierte también en un elemento sorpresa, llegar al aula y encontrar materiales que potencian la luz y el color favorecen la atención, la emoción y con ello el aprendizaje, es lo que llamamos “pedagogía de la luz”.

Fomentamos un lugar para para explorar, expresar y crear pensamiento… pero que también que permita el trabajo en cooperativos y colaborativos en consonancia también con nuestro programa de Innovación Pedagógica. Trabajar en equipo favorece la búsqueda de soluciones creativas.

Huele, toca, siente… generamos propuestas de exploración que acompañan el desarrollo de la creatividad,  preparamos el ambiente para que los niños sean los protagonistas.

 

 

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